¿Son las piezas y prototipos impresos en 3D mediante SLA herméticos? La respuesta es sí, definitivamente lo son.
La estereolitografía, también conocida como SLA, funciona enfocando un láser ultravioleta sobre una cuba de resina fotopolimérica. Esta se solidifica fotoquímicamente y se forma una sola capa del objeto 3D deseado. Este proceso se repite para cada capa hasta completar el modelo.
La materia prima para la SLA es una resina líquida fotosensible. Esta resina fotosensible es altamente sensible a la luz y produce una rápida reacción de polimerización bajo la irradiación del láser para completar el curado. Durante este proceso, la resina fotosensible es completamente impermeable y no reacciona con el agua. Esta es la razón principal por la que las piezas y prototipos impresos en 3D mediante SLA tienen buenas características de impermeabilidad.
Como todos sabemos, los productos SLA tienen una superficie lisa y buenos detalles. A diferencia de las piezas impresas por FDM, los productos SLA no tienen líneas de impresión; a diferencia de los productos impresos con nailon, su superficie no es porosa y no permite la penetración del agua.
Además de esto, los componentes impresos mediante SLA tienen grandes tolerancias, por lo que casi no hay espacio de aire entre los múltiples componentes y, cuando se ensamblan entre sí con sellos o juntas, la carcasa no solo es completamente impermeable, sino que también es capaz de soportar una enorme presión.
Además, la SLA ofrece numerosas ventajas, como un moldeo rápido, resistencia a altas temperaturas y buena tenacidad. Sin embargo, cabe destacar que los materiales de resina fotosensibles se vuelven quebradizos y amarillean gradualmente con la exposición prolongada a la luz exterior, por lo que no son aptos para su uso en exteriores. Si se van a utilizar en agua y sometidos a cierta presión, son una opción muy adecuada.
